Aun no se inventa la palabra
Que describa con exactitud
Lo que habita en este pecho
Carcomido por el tabaco
Y por las dudas
En este cráneo
Maltratado por el tedio
Y en estas manos
Cansadas de buscar tu piel...
Aun no inventan el idioma
En el que decir te quiero
No te aleje de mi lado
Y comprendas que te quiero
Sin querer…
Sin que quieras irte con mis
alas de hueso
Dejándome la nada
Donde naufrago cada noche
Que tu silencio me apuñala...
Y que me dejes de nuevo al borde del abismo
De cual me sacaste
Para enjuagarme la frente con
tus lágrimas
Sin que decidas sin consultarme
Que desde ahora solo te tendré
en el papel
Que acumulo para disimular
Que no te olvido
Y que dueles,
Y que dueles tan bonito…
Que me dejas sin el cigarro de
después,
El del triunfo, después de cada
cita,
De cada sonrisa marchita,
Después de cada beso,
Después de dejar nuestro prólogo
a medias...
Y es que aún no inventan el
medio
Para medir el daño
No hay escala para medir cuanto
se puede extrañar a alguien
Ni que tan triste puede llegar a
ser un hombre
Y sin embargo aún busco la
palabra exacta,
Sigo buscando el idioma,
Sigo buscando tu piel…
