sábado, 3 de diciembre de 2016

EFIMERO

A mi no me hablen de marihuana
ni cocaína,
para mi la droga mas grande
siempre fue su sonrisa.

Su mirada y cabello,
su dulce voz
y el sabor de sus besos.

Aprendí de las noches en vela,
a valorar su recuerdo;
esa foto en blanco y negro
que solo habita en mis letras.
Aprendí por las malas
que quizás lo eterno no es imposible,
tan solo es efímero.